Allí en el tiempo de los sueños
en el interior de Australia
las pinturas rupestres
de una historia de amor atemporal
incalculable
En el Cantorbery de Chaucer
copilotos, en peregrinación
a sí mismo
las miradas tímidas
que nunca se convirtieron en palabras
solo los pasos coincidentes
marcó ese viaje
En una guerra que se sumergió
el mundo entero
en un gueto o una base aérea
el amor se convirtió en miedo
de pérdida
de la muerte
sin promesa
de cualquier futuro
en otra vida
un marco sepia
de una sonrisa
en dos corazones
la misma mirada
los mismos ojos
Ahora los fragmentos
de un alma compartida
viviendo dos vidas paralelas
polos opuestos
por favor, quédate ahora
porque en todos esos
otras vidas
no pudiste !!